lunes, 5 de octubre de 2009

UN MUNDO, UNA SALUD. Medicina humana, veterinaria o ecológica.

Un mundo, una salud. Bajo este eslogan Bill Karesch de la Wildlife Conservation Society y sus colegas desarrollaron un programa cuyos principios provienen de la ecología, de la cual la medicina humana y la medicina veterinaria serían meramente subdisciplinas! Según esto no se trataría de la salud de los humanos, del ganado, o de la vida silvestre, sino de la salud y equilibrio de ecosistemas alrededor del planeta, es decir sólo hay una salud. De hecho, seres humanos, animales silvestres o de producción, gorilas, peces, murciélagos, monos y ratas, mosquitos, bacterias y VIRUS, todos juntos estamos metidos en esto como un conjunto interactuante, en que el contacto entre dos especies representa la oportunidad para los patógenos de expandir su radio de acción. La infección puede ir en ambos sentidos: de los animales al hombre y de nosotros a ellos. La tuberculosis, el polio y la influenza son amenazas para los primates no humanos y se conocen como antropozoonosis.

El contacto entre los seres humanos y otras especies está aumentando significativamente en los últimos años, condicionado por variados factores entre los que destacan: a través del cuidado de animales domésticos como ocurrió con el virus hendra, la crianza intensiva de animales en la ifluenza aviar altamente patógena, por el manejo de mascotas en el caso de la viruela de los monos, la destrucción de hábitats en las fiebres hemorrágicas americanas, matando y comiendo animales salvajes posiblemente en el SIDA, y por la penetración del hombre en la vida silvestre, en que la malaria es un buen ejemplo. Una vez que se ha producido el contacto y contagio la situación infecto-epidemiológica se amplifica por la sobrepoblación humana y por la facilidad con que viajamos de un lugar a otro. No cabe la menor duda de que si surgiera una nueva enfermedad ...-influenza aviar, influenza mal llamada porcina-... que se transmita de persona a persona por un simple apretón de manos, un beso o un estornudo, esta afección infecciosa podría dar la vuelta al mundo, obviamente antes de 90 días, y afectar, tal vez, a millones de personas antes que la ciencia médica encontrara la manera de controlarla.

Siempre hemos estado rodeados de agentes infecciosos, y todos, desde bacterias a los vertebrados superiores, hemos sufrido las consecuencias manifestadas en grandes plagas que han asolado el mundo vivo. Los patógenos como los virus y bacterias, serían bestias relativamente pequeñas que destruyen a sus presas desde el interior en contraste con las grandes bestias salvajes que lo hacen desde el exterior. Sin embargo, las infecciones y enfermedades infecciosas, bajo condiciones normales, deben ser consideradas como naturales. Cuando un patógeno da el salto de un animal al hombre, las enfermedades que producen se agrupan bajo el concepto de zoonosis, palabra del presente pero que seguramente será muy de moda en los años venideros. La rabia es una antigua zoonosis que sigue matando a pesar de las vacunas con que se ha intentado controlarla o erradicarla. La viruela no es una zoonosis y fue erradicada, en 1979, gracias las vacunas y al hecho de que el virus no podía esconderse en otros animales. Sin embargo, se lee que el virus habría sido guardado en congeladores de -70° C o en nitrógeno líquido con el fin de preservarlo para una instancia de preparar vacunas... o para la guerra bacteriológica... La viruela de los monos, parecida a la viruela, afecta tanto a monos como a otras especies. La fiebre amarilla que también afecta a los monos y al hombre, es causada por un virus que se oculta en varias especies de mosquitos, por lo que posiblemente nunca pueda erradicarse. El comportamiento de este y otros muchos virus constituye una estrategia de transmisión indirecta o de supervivencia indirecta. Por otra parte, algunos virus pueden esconderse en huéspedes reservorios que portan el virus y no se enferman pero lo reproducen y lo mantienen en la naturaleza, tal es el caso de los ratones con el virus Hanta, los murciélagos con los virus Ébola, Hendra y Nipah. Debido a este hecho, algunas enfermedades parecen desaparecer pero vuelven. El patógeno parece haberse terminado pero quizás no.

El virus Hendra que apareció o emergió en Brisbane, Australia, cuando una yegua que buscaba defenderse del sol, se guareció bajo una higuera, y mientras pastaba se comió heces, orina, placenta y virus de murciélagos. Obviamente se infectó y contaminó a otros caballos y a cuidadores de ellos, provocando su muerte. Qué había pasado, estuvo la yegua en el lugar equivocado o los murciélagos estaban donde no debían estar. La respuesta está en que el hombre ha destruido los bosques de eucalipto y alterado los hábitos de alimentación y anidamiento de los murciélagos llamados zorros voladores, que han debido volar hacia otros lugares, lo que los acercó al hombre y a los caballos. En el brote emergente ocurrido en 1994, 13 caballos murieron en forma rápida al igual que un capataz y el entrenador. Recientemente, 2009, el virus Hendra reapareció o reemergió en Australia, afectando a caballos y hombres. El virus es un Parmyxovirus y el portador es un murciélago Pteropus alecto una especie de murciélago de la fruta.

De los agentes zoonóticos los virus serían los más problemáticos, exhiben una gran plasticidad y evolucionan rápidamente, no son sensibles a los antibióticos, son tremendamente simples y pequeños y pueden ser muy virulentos.

Aceptemos que los virus carecen de medios de locomoción pero que algunos de ellos han dado la vuelta al mundo. Según el virólogo Stephen S. Morse, estas entidades nosológicas no pueden correr, arrastrarse, nadar ni volar, pero, SON PORTADOS!!! Yo agrego que los virus no tienen sexo, pero vaya que se han reproducido...

Se sugiere leer: David Quammen.Contacto letal. Cómo intercambian enfermedades animales y humanos. National Geographic. páginas 2 - 29. Junio, 2008.

4 comentarios:

  1. Un mundo,una salud. La medicina humana y veterinaria serían meramente subdisciplina de la ecología en que la salud y equilibrio de los ecosistemas planetario.

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  2. Muy interesante su articulo, y deja de lado un poco la vision antropocentrica que se suele tener.
    Pienso que los grandes culpables de las nuevas enfermedades que podrian aparecer somos nosotros, los humanos. Esperemos que no sea asi.

    Abrazotes.

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  3. haz un link a lo que recomiendas leer.Basta con que coloques la URL que tiene un articulo,paper o publicacion de lo que recomiendas.
    Por ej
    http:jorgegajardorojas.blogspot.com/
    que es el link a mi blog

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  4. No he encontrado el link del artículo de David Quammen. ¿Lo tienen?
    Gracias

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